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jueves, 25 de julio de 2013

SMOOTHIE DE PIÑA Y PAPAYA

Quería dejaros esta receta antes que el blog de Cocina Paradiso se vaya de vacaciones (la página de Facebook seguirá en marcha y esperamos que participéis) porque la verdad es que está buenísimo, es refrescante y en verano apetecen un montón estas cositas.
Desgraciadamente el faro es falso. Que ya quisiera yo
 tomarme ésto en un chiringuito de playa
al atardecer... y tocadito de ron!

La verdad es que desde que tengo la famosa maquinita, me he aficionado a congelar frutas. Lo comentaron en uno de los cursitos de cocina a los que fui y es un puntazo. Con que tengas una batidora potente de mano, o de las de vaso, el tener furta congelada te ayuda a tener en un momentito una merienda saludable, pero también un postre estupendo sólo con que tengas un huevo a mano, o un helado añadiendo simplemente un poco de azúcar y un poco de nata, o un granizado.
Para congelar fruta, tenéis que lavarla bien, y en los casos necesarios  pelarlas, quitarle rabitos, huesos, partes feas, etc. Es decir, dejarla tal como si te la fueses a comer. Después la cortas a trocitos lo que facilitará el posterior picado/triturado, la metes en una bolsa de congelación o en papel de film, a poder ser bien repartidita para que no se peguen mucho los trozos. Es importante también que la guardéis ya madura. La técnica te viene muy bien para esos plátanos que se te han pasado un poco, esas fresas súper maduras que tienes por ahí que o te comes o te toca tirarlas, o simplemente para disponer de fruta fuera de su temporada. En fin, ya me entendéis ¿no? Puedes congelar piña, plátano, kiwi, fresas, melocotón, frutos del bosque... Yo diría que casi todas las frutas. ¿Qué te parece un granizado de sandía para merendar, así hecho en 2 minutos? Mola ¿no?

Los yogures también se pueden congelar. Puedes hacerlo con yogures naturales, o ya de sabores, o triturar fruta natural junto con tu yogur favorito y congelarlo así en tuppers herméticos. Ahora hay como una fiebre del yogur helado, y los venden  en supermercados como un producto mucho más caro que el yogur normal y también en tiendas especializadas con algunos "toppings" que se venden a precio de oro, cuando tomarte un yogur helado en casa es tan barato como la marca que escojas comprar.
Poco a poco iré dejando recetitas fáciles para que podáis hacer muchas cositas sin complicaros la existencia. Os aseguro que hay una infinidad de cosas chulas que se hacen en un segundín en casa. El otro día os propuse un granizado de piña y melón, y hoy os traigo un smoothie, más denso y cremoso y con yogur. Espero que os guste.

INGREDIENTES

Media papaya.
6 rodajas de piña en su jugo congelada, más un poco de su jugo
Un yogur de piña 0% congelado.
Un yogur natural edulcorado 0%
Hielo picado (opcional)


*Yo he puesto los yogures 0% MG porque son los que tengo en casa normalmente, y no le añado azúcar porque éstas frutas son lo suficientemente dulces y además los yogures van edulcorados, pero tú lo puedes hacer con los yogures que quieras. Sólo ten en cuenta que si el yogur no es azucarado o edulcorado, habrás de añadir un par de cucharadas de azúcar a la preparación.


Primero cortamos la papaya a trozos que quepan en el vaso de tu batidora y añadimos la piña, que en principio ya habréis congelado a trocitos, más un chorro del jugo de la piña. Le damos caña a la batidora hasta que obtengamos un puré sin grumos. En Thermomix pasamos directamente de 0 a 5, mantenemos unos segundos, y poco a poco llegamos hasta el 10. En unos 10 segundos lo tienes listo.

Ahora añadimos los yogures. Mi yogur de coco estaba congelado porque tenía unos a punto de pasarse y los congelé, pero si lo tienes de la nevera no pasa nada. Con los yogures congelados, solo has de tener cuidado que sean recipientes de los normales de plástico, para que puedas fácilmente liberarlos de su envase. Puedes cortarlo con unas tijeras de cocina o esperar un poco hasta que puedas deslizarlo, pero no congeles yogures de los que van en tarro de cristal o con formas redondeadas porque no los podrás sacar.

Si es necesario corta sobre una tabla el yogur congelado en cuatro cuartos (con la thermo no es preciso) y de nuevo a darle caña a la batidora hasta que la crema se integre.

Queda denso, como un smoothie. Si lo quieres más líquido, sustituye uno de los yogures por medio vaso de zumo de piña, y añade hielo picado.



Te da para un par de vasos grandotes, como los de la foto que te valen para un almuerzo o merienda. Si lo quieres como postre, sírvelo en vasos pequeños, te saldrán de 4 a 6. ¡Que lo disfrutes!


miércoles, 24 de julio de 2013

LUGARES EN VALENCIA: CERVECERÍA TITO

Mira que somos fáciles de liar. Somos los típicos que quedamos para tomar una cervecita, y nos enredamos, nos enredamos... Y de pronto alguien está pidiendo unas bravas, y ¡ya está el lío armado! Pero claro, tampoco es plan de gastarse un pastizal un martes cualquiera, así porque sí... Así que nos encanta conocer sitios donde poder cenar bien, sin arruinarse en el camino.
Uno de esos se llama "cervecería Tito" aunque creo que para todo el barrio es simplemente "el titos". 
El Titos lo conocemos desde hace muchísimo tiempo. Y seguimos yendo de vez en cuando porque es el típico sitio que es un valor seguro. No hay sorpresas. No se falla. Que viene gente de fuera y quieres picar unas tapitas: al Titos. Que llegan fallas y casi todos los locales disparan los precios y rebajan la calidad: al Titos. Que quieres cenar bien en una zona de copas: Al Titos. Que alguien te pide una recomendación sobre un sitio en Valencia para comer a un precio razonable... ¡Efectivamente! ¡Al Titos!
Tito empezó con un local en la calle Buen Orden de Valencia. Tan bien le fue que acabó quedándose otro local en la acera de enfrente, y después uno al lado del primero. Y si no estamos equivocados, el cuarto va en camino. Los tres comparten la misma carta, y en el último además hacen menú del día, aunque la verdad, cuando nosotros vamos siempre es para la combinación tapas-bocata que es la que más mola en el Titos. Porque si por algo destaca este bar - cervecería, es por raciones generosas - como estas bravas, que no llevan una salsa especial como las famosas bravas de Casa Cesáreo, pero al menos están recién hechas, y no blandas y recalentadas en el microondas, 

O esta morcilla de Burgos, rodajas gorditas pasadas por la plancha sobre una cama de papas caseras, 

O la puntilla, (chopitos en otros sitios) tierna, bien limpia de plumas y con un rebozado fino y crujiente -
Lo más bueno son las patitas. Mmmmh..

y bocatas hermosos con mezclas originales y/o contundentes, como este de huevo revuelto con patatas y Serrano:

¿Patatas en un bocadillo? Oooh Yeahhh!!!!

O nuestro favorito, el B18, una auténtica bomba con sobrasada, bacon crujiente, huevo y queso. Ufff.... Prueba a hacértelo en casa, porque es un auténtico placer no apto para operación bikini, ni para el sentido común, en general. Sólo faltaría el postre, pero es que desde que han quitado la tarta de galletas, que era como las de nuestras abuelas, casera, la de toda la vida, buenísima, pues cambiamos el postre por una copita de orujo de hierbas, para digerir mejor.

Este bocata te quiere tanto, que se pegará a tus arterias y ya no te abandonará más, por lo que quedarás enganchado a él de por vida.

Y si te digo que te zampas dos o tres tapas, más un bocadillo, la bebida, y un café o una copita y sales a menos de 15 euros, y que al lado tienes toda la zona de pubs de Juan Llorens para tomar algo o pegarte unos bailes, pues ya está el plan para este finde, no?

Esta cara lo dice todo...
 

¿Y vosotros? ¿Cuál es vuestro clásico para ir a tomar algo? Ese que siempre permanece cuando no hay otro plan novedoso a la vista? Contadnos pilluelos... No os guardéis el secreto...

domingo, 14 de julio de 2013

EL EFECTO NUNCA JAMÁS

Todos conocéis la historia de Peter Pan.Y todos  nos vamos haciendo mayores, algunos tardamos más que otros. Si recordáis la estupenda aunque triste "Descubriendo Nunca Jamás" de Mark Forster, el autor James Barry fascinado por los sentimientos infantiles se da cuenta que la única forma de llegar a todos los públicos es hacer que sean los niños los que transmitan la belleza y alegría de la obra. Al llenar de niños la platea del teatro contagia al público esa inocencia que transmiten las risas y expresiones de asombro, alegría y emoción de los niños.



Yo llamo a esto el efecto nunca jamás. El miércoles, por primera vez, nos llevamos a nuestras sobrinas al cine y vinos "Gru 2, mi villano favorito". Una película pensada y perpetrada para entretener y divertir a los niños. Es muy infantil, su argumento es sencillo y clásico, y están los coprotaginistas que son los Minions concebidos para hacer gracia a los niños a base de golpes, pedos y gamberradas. A nosotros nos gustan las películas de animación. Pixar o dreamworks han hecho películas como Toy Story, Up, Wall-e, Shrek, Como entrenar a tu dragón... Todo películas que encantaron a los niños y también a los adultos. Gru 2 no es de estas. Es una película para los peques.

Esto es malo? No necesariamente; en principio lo ideal es que la película sea buena y todo el público lo disfrute. Pero si nos paramos a pensarlo, si hay películas solo para adultos, porque no puede haber películas donde sólo disfruten los niños? Cuando los directores de culto sacan sus películas a la crítica se le hace el culo pepsicola y a algunos incondicionales, la peli la ven 4 gatos porque a la mayor parte de la gente le parece que la peli es un torro de muerte. Por eso digo que cuando hacen una peli solo para los niños el problema es que los adultos les tienen que acompañar, cosa que no pasa con las pajas mentales de Las Von Trier, Terrence Malick y otros tantos que han hecho grandes películas pero en muchas ocasiones son grandes para ellos y unos pocos más.

Gru no está tan mal. Te ríes y pasas un rato agradable. Pero ir con los niños vale la pena aunque no vayas a disfrutar de la peli. Oirles reírse, aplaudir, asombrarse o comentar cosas que les llaman la atención  son sensaciones y momentos que bien valen una entrada. La ilusión de ir al cine, las luces que se apagan, la pantalla gigante, las palomitas, son todo recuerdos de infancia que a todos nos gusta tener. Esas películas son las que hacen que los niños cojan gusto por el cine. Ver a unos padres que se meten a ver Posesión infernal con los críos, no lo entiendo. Si vas con niños al cine, que disfruten!! No los traumatices de por vida!!!

 
Dejaos atrapar por el efecto nunca jamás, contagiaos de la risa y la ilusión de los niños pequeños y disfrutad con ellos. El cine es para disfrutar y nada hace disfrutar más que el compartir con los peques una película para ellos. En vuestra mano está crear a los cinéfilos del futuro!!
 

miércoles, 10 de julio de 2013

GRANIZADO DE PIÑA Y MELÓN

Ayyyy... Que bueno está este granizado. La verdad es que la foto no le hace justicia. Es lo que tiene hacer fotos "de andar por casa" muchas veces sin buena iluminación, ni un escenario preparado... Ni conocimientos de fotografía vaya! Tampoco contamos con una infinidad de menaje de múltiples colores para crear contrastes, ni más vajilla ni cubertería que la que usamos para comer en casa. Casi siempre hacemos las fotos de los platos que vamos haciendo con el móvil, así que aún estamos bastante contentos del resultado que nos da a veces. Eso sí. La ilusión y el cariño lo ponemos siempre. Así que porfa, perdonadnos si nuestras imágenes no son de estudio ni de revista. Pero todas las recetas están probadas y comprobadas. Espero que os animéis a probar alguna.



Este granizado lo he sacado de un libro que me regaló mi amiga Ana. Por si a alguien le interesa, se llama "Batidos y zumos" y es de la editorial Parragon. Estoy segura que le voy a dar bastante caña a este libro durante el verano, ya que ahora apetecen estas cosas fresquitas. Éste concretamente me encanta, porque son todo frutas, no lleva azúcar añadido, ni falta que le hace. Está buenísimo tal como está, y todo son ingredientes fáciles de encontrar, nada de cosas raras, así que ¡atentos! Que ésta semana lo hacéis fijo!
Os doy los ingredientes para 4 vasos:
- Un vaso no lleno del todo de zumo de piña, de estos sin azúcar añadido.
- 250 gr. de melón galia (Son esos redondos y pequeñitos de piel amarilla)
- Una lata de piña en su jugo (8 rodajas) o 280 gramos de piña natural sin el centro, que previamente habremos cortado en trozos y congelado en una bolsa de congelación.
- 8 cubitos de hielo.
Necesitarás batidora o robot de cocina capaz de picar hielo.

Tan fácil como meter todos los ingredientes menos el hielo en el vaso de la batidora y triturar hasta conseguir un puré.

Los 8 cubitos que yo he puesto son de los de cubitera casera. Si son industriales con 5 o 6 suficiente. ¡Ojo! Si usas cubitos industriales, mójalos unos segundos bajo el grifo. Éstos hielos llevan muchos conservantes y cuesta mucho más triturarlos que los que haces en casa solo con agua. Si tu batidora no es muy potente puedes también envolverlos en un paño y darles un par de golpes hasta romperlos para ayudar a la máquina.

Pues ¡ala! Añade los hielos y ¡caña a la batidora! 
En Thermomix, directamente a velocidad 5 para romper el hielo, luego sube al seis y medio cinco o seis segundos hasta que la textura sea de granizado.


Está de lujo!!! Fresquito y sano!!!! Os va a encantar. Ya me lo contaréis... 
Besitos co-cine-rit@s... 

martes, 9 de julio de 2013

CIENCIA FICCIÓN, AVENTURA Y ESPECTÁCULO = STAR TREK


Me gusta y mucho la ciencia ficción. De mis películas, series y novelas favoritas, muchas son o tienen ciertos componentes de este maravilloso género. Star Trek la serie original , fue algo tan mítico que marcó a toda una generación y fue enganchando a las siguientes. Mis padres la recuerdan de su infancia, yo no he visto la serie, vi algunas de las películas antiguas y en general me resultaron algo aburridas, aunque con algunos puntos muy interesantes y sobretodo muy buenas ideas. La etapa de la nueva generación tampoco me hizo ir al cine, ni verlas en DVD. Pero cuando escuché que JJ Abahams relanzaba la franquicia no dudé en ir al cine aprovechando el reinicio.



Las tres tripulaciones. El espacio es su medio natural.


El problema con este tipo de supersagas es la pereza que da porque hay mucho material. Y si no das con el adecuado puedes perder el interés, y dejar pasar grandes cosas. Por eso se hacen reinicios, para contar algo de una forma actualizada, a veces es un desastre, pero  en este caso J.J. Abrams dio en el clavo. Dejó ese sabor de ciencia ficción y le dio más acción y aventura, con unas dosis de humor, lo que es cine de entretenimiento bien hecho.

Vamos con esta segunda entrega que es la que vimos el domingo. La película lo que trata es la relación de amistad entre los integrantes de la nave Enterprise. Al ser de mundos distintos, el dúo Kirk/Spock forman un gran equipo con una gran falta de entendimiento. Si la primera película nos contó como esta pareja se ve obligada a entenderse debido a circunstancias de emergencia y así inician su amistad. En esta segunda se profundiza en esa amistad, pero también en los lazos que unen a los miembros de la tripulación, que más allá de ser camaradas se darán cuenta de que los lazos que les unen son más propios de una familia. Pensaréis que la película de la que os hablo no puede ser de acción por lo que he puesto, pero tiene y mucha, y es un gran espectáculo que sirve de vehículo para tratar estas relaciones. La aventura empieza en la tierra y se convertirá en una gran persecución, con trampas y giros, que recorrerá varios mundos y galaxias, y descubriremos un villano interpretado por Benedict Cumberbatch que para mi es de lo mejorcito que he visto en mucho tiempo, un personaje bien trabajado y definido que hace estremecerse al personal en más de una ocasión.

El villano, no digo nada. Hay que descubrirlo.
 
Los actores están muy bien, todos, la dupla Kirk (Chris Payne) Spock (Zachary Quinto) lo borda y hacen evolucionar a sus personajes, vemos como cambian y como aprenden y ese cambio se refleja en pantalla. De los secundarios destacar 3 McCoy (Karl Urban) que raya la perfección y nos da unos momentos de humor geniales, Scotty (Simon Pegg) que es desternillante y tiene algunas escenas dramáticas en las que demuestra sus cualidades. Y por último Uhura (Zoe Saldana) espectacular, guapísima es esa mujer y da un punto intenso a su personaje y ese toque sexy y romántico que tan bien queda en la peli. Imagino que para los superfriki a de la serie oírla hablando en klingon debe ser lo máximo jejeje

A esta chica le van las cosas puntiagudas jeje
 

Tengo muy claro que lo bueno de JJ es que tiene tan buen sentido del espectáculo, filmando escenas de acción claras y nítidas, como sentido del dramatismo, sabe llegar al espectador y saca grandes interpretaciones de los actores, creo que por eso se le compara bastante con Spielberg. A mi me encanta como hace las cosas.

Acción en planetas lejanos! Que más se puede pedir?
 

También destacar lo bien que se entiende con su músico, un Michael Giacchino que vuelve a hacer un gran trabajo (pinchad si aquí para escuchar un tema de la BSO) y se está convirtiendo en uno de mis autores favoritos en cuanto a bandas sonoras. Creo que esa relación también recuerda a la que han tenido Williams y Spielberg.

Recomendamos ver esta peli en el cine por su espectacularidad y alucinantes efectos. Si queréis algo más barato la tenéis en programa doble en el autocine si sois de Valencia, aunque perderá algo. Y si no habéis visto la primera parte es un buen momento. Cada día soy más trekie!!

Larga vida y prosperidad!!

jueves, 4 de julio de 2013

AMIGOS DE COCINA PARADISO: CARBA Y ANA


Hola frescos!! Hoy estamos más contentos que nunca gracias a nuestros amigos Carba y Ana. Una amistad que surge del ciberespacio y el cariño por el personaje de Indiana Jones, y que bien le viene a la historia que nos traen hoy. Porque la amistad a veces se encuentra también "Cuando menos te lo esperas".
Ellos hacen la primera colaboración de "Amigos de Cocina Paradiso", una sección en la que todos podéis participar, si habéis visitado un sitio especial y os ha hecho acordaros de nosotros, contádnoslo y lo publicaremos. Aquí tenéis un bonito ejemplo.
 
LE GRAND COLBERT: CUANDO MENOS TE LO ESPERAS

 
Hay cosas que pasan cuando menos te lo esperas.

 Tenemos por costumbre perdernos por las ciudades que visitamos. A veces literalmente. Es la mejor forma de empaparse de un lugar y, en ocasiones, te depara encuentros inesperados. En esas estábamos, callejeando por París, a pocas manzanas del Louvre, cuando tropezamos por casualidad con un restaurante de pinta elegantona que se ganó nuestra atención. Le Grand Colbert, se llamaba. El caso es que nos sonaba de algo, pero no éramos capaces de ubicarlo en nuestros recuerdos. La duda, no obstante, fue breve. Un rápido vistazo a un póster en la entrada del establecimiento nos hizo refrescar nuestra memoria: “Something´s Gotta Give”. ¡Por supuesto!

 


 

Le Grand Colbert es el restaurante donde transcurre la (es)cena final de la película “Cuando menos te lo esperas”, una comedia romántica protagonizada por Jack Nicholson, Diane Keaton y el soso de Keanu Reeves. No entraba en nuestros planes, pero decidimos, claro, que teníamos que cenar allí.


 

Y allí fuimos, a la noche siguiente. Llegamos sobre las nueve y cuarto y, a pesar de que era un martes, estuvimos en un tris de tener que desistir de nuestra idea al no haber reservado mesa con antelación. Sin embargo, el camarero se las ingenió para agenciarnos una mesa para dos en un rinconcito muy acogedor. Como curiosidad, comentaros que Diane Keaton y compañía ocupaban en la película la mesa situada justo detrás de nosotros, en el lugar donde se sienta la chica rubia de coleta que está a nuestra espalda en la foto inferior.

Aquí la pareja de frescos posando, se les nota en la cara que están sufriendo. SON TAN MONOS!!
 A raíz de su aparición cinematográfica, Le Grand Colbert se llenó de turistas, como era nuestro caso, pero se las ha arreglado para conservar un excelente nivel culinario: es una brasserie de verdad, y se nota. Toma su nombre de Jean Baptiste Colbert, intendente de Hacienda del rey Luis XIV, por estar situado en la que fuera su residencia. El local es elegante, espectacular, amplio, con una luz cálida, ambiente agradable y mucho encanto. Hay varios turnos y es uno de los pocos restaurantes donde es posible cenar tarde (en el sentido que damos los españoles a cenar tarde) en París.
 
El local tiene una pinta magnífica.


En cuanto al menú, para abrir boca pedimos una salade de tomates à l’ancienne et mozzarella au pistou, una ensalada de tomates de varias clases y colores (rojo, rojo oscuro, rosadito y verde) con mozzarella, con los tomates más sabrosos que hemos probado en muchos años. De segundo, ambos pedimos magret de canard au poivre avec pommes sautées, un exquisito magret de pato a la pimienta con patatas. Para beber, un vinito blanco rico rico (cuyo nombre no recordamos, snif) y agua. Y, para cerrar a lo grande, de postre pedimos un clásico: véritable cheese cake coulis de fruit rouge, una tarta de queso deliciosa, casera, con su base de galletita en su punto justo y coronada por fresas naturales.

Aquí Ana cual guruguru (ella ya me entiende), acechando a la tarta...

Todo ello aderezado con un camarero que hubiera sido la estrella en cualquier película de humor: simpático y servicial a partes iguales, a medias entre torpón y eficiente: un tropezón aquí; un tenedor al suelo por allá; opsss, el tapón de la botella de agua que vuela; una servilleta emulando a la alfombra de Aladino… pero sin perder esa elegancia francesa, ese aplomo profesional. Ni su sonrisa. Muy de comedia romántica, sí señor.

También hay que decir que pecamos de pardillos. Sólo la botella de agua nos costó siete euros… imaginaos nuestras caras cuando escuchamos pedir a los de la mesa de al lado una jarra de agua del grifo.

 
El resultado final: clavada parisina. Pero disfrutada a conciencia, eso sí. Y, total, tampoco creo que repitamos de aquí a, qué sé yo,… dos semanas por lo menos, jeje. Tirando por lo bajo.

Al final, tras una generosa sobremesa, callejeamos de nuevo, como en la peli, ya entrada la noche, y para rematar, un paseíto en la mejor compañía por la orilla del Sena.

 Y una historia de amor. La nuestra. Ésta, real. Sin pelis que valgan.

lunes, 1 de julio de 2013

CINE CON SABOR A GREASE

En Valencia tenemos un Autocine, el Autocine Star en España creo que hay sólo 4 ó 5 así que es algo bastante particular. Aquí funciona todo el año, en invierno la gente no sale del coche, pero cuando llega el buen tiempo es cuando se ve un ambiente muy peculiar. La gente se va a pasar la tarde-noche y se va muy preparada; sillas, mesas, bebida, hielos, cubatas, bocadillos y tuppers, toda la familia con perros incluidos.


Típica estampa de la gente con sus mesitas y sillas delante de sus coches.

Entre peli y peli ves como los perros se dan una vuelta y se saludan. Los hay que se compran la cena allí, se forman colas gigantes en el bar para pedir burguers, perritos, bocadillos, tacos, palomitas, helados y esas cosas. Sí, es como esas escenas de pelis en los autocines americanos, como en Grease, Regreso al futuro o American Graffiti,  pero con sabor español castizo.

Digamos que es una experiencia cinematográfica diferente; no tienes la sensación de sala de cine que te hace meterte mucho en las pelis, es más como una fiesta, la gente comenta mientras ve la peli, el perro se escapa, de vez en cuando oyes un coche que se enciende para quitar el vaho acumulado en la luna delantera, ves a la gente fumando y comiendo dentro o fuera del coche. En resumen, algo entre el cine y una cena de sobaquillo en plan excursión.
 

Si fuesen cádillacs y coches antiguos, parecería una escena de Grease jejeje

Para nosotros lo complicado del autocine es encontrar una programación que queramos ver allí. Nos pasa mucho que al ser dos pelis, una ya la hemos visto, o una la preferimos ver en un cine con más calidad  de imagen y sonido. En el autocine mola ver películas ligeras, comedias, de terror, o cosas así. Si es algo en plan espectacular como la última de Superman o algo más serio tipo La Caza, pues prefieres un entorno de más calidad y que te permita centrarte, porque el autocine es algo más distendido. Así que al ver en cartel After Earth y Monsters University decidimos verlas allí, dos por el precio de uno, aunque con la duda de After Earth por su supuesta espectacularidad visual. Fue un acierto verlas allí, una tarde noche en familia con Dharma incluida.
 

Mejor compañía imposible, aquí dando un paseito previo a la primera peli.

No lo dudéis, es algo diferente y que vale la pena probar. Consejos, id preparados, mesa, sillas, todo lo que os haga estar más cómodos aunque dentro del coche al escuchar la peli a través de vuestra radio se oye mejor. Si podéis llevar la cena, se puede comprar allí y hay cosas muy ricas, pero las colas que se hacen para pedir son un infierno. Mejor unos buenos bocatas, papas, palomitas y bebidas de casa, y encima más barato.
 
Por las fotos podréis observar que es bastante popular, nosotros llegamos una hora antes de que empezara la peli y estaba llenísimo, nos tuvimos que poner en una parte bastante lateral, así que como te llevas cosas para pasar el rato mejor llegar antes y colocar el coche lo más centrado y cerca posible de la pantalla. También está el típico listo que deja el coche y se lleva su chiringuito a una zona mejor, pero ahí ya dependes de la buena voluntad de la gente y que te hagan algo de hueco. Aunque por lo visto ayer el ambiente es bastante bueno.

Y ahora con el calor con la entrada te dan una toallita repelente de mosquitos. Pero si te llevas algo de aután no estará de más. No es muy escandaloso, pero al estar entre los arrozales y la playa si que hay mosquitos en verano, y más vale prevenir.
 

Cuanto tiempo hace que no veiais un cine lleno hasta la bandera? Aquí un ejemplo.
 
En cuanto a las pelis ahí va un pequeño comentario sobre cada una, no me voy a extender porque no son gran cosa y sino se quedará un tochopost que ninguno leeréis completo jejeje

AFTER EARTH:

Con Will Smith y su hijo Jaden, dirigida por Shyamalan. Prometía mucho, siempre me ha gustado este director, ofrecía pelis de ritmo pausado y temas interesantes, con buenos giros y montajes muy cuidados. Aquí se nota poco su mano, algo en montaje y en el trabajo con los actores, pero el guión es malo, a la media hora ya sabes todo lo que va a pasar y cómo, resultando todo bastante aburrido. Y además, más vale que vayan cambiando al doblador de Jaden Smith porque lo hace fatal, te saca de la película de lo malo que es.
Alguna escena espectacular pero ni siquiera el CGI está a la altura. Son los problemas de tener un buen bagaje en películas de ciencia ficción, que esto te deja frío. Quizá los más jovencitos la disfruten más, es cine muy familiar.
Yo no la recomiendo y haciendo caso a un seguidor si la tuviese que comparar con un plato de comida sería comida precocinada, le han puesto los ingredientes típicos y al horno, poco sabor y poco mimo por el producto.

MONSTERS UNIVERSITY:


La precuela de Monstruos S.A está bien para ir con los nanos, ellos disfrutarán. Nosotros nos reímos un rato y se pasa bien, pero pixar últimamente está flojeando. Tampoco esperábamos más. Nos cuentan como los protas se conocen y hacen amistad en la universidad. Puntos graciosos, alguna referencia cinéfila y un producto bien diseñado y distraído sin más. Para toda la familia. Sería un bol de palomitas, te lo zampas y te olvidas.

Hasta aquí las críticas por hoy. La semana que viene Star trek en la oscuridad
Id al cine y comentadnos vuestras impresiones de lo que veáis. Nos encanta que participéis!!